Gruppe Oeldorf, Peter Eötvös Director
Estreno: 1978, Wittener Tage für neue Kammermusik

Un sonido parecido al de una campana (es en realidad el de una «paila», recipiente grande de cobre en el que en Ecuador se cocina al chancho) resuena 30 veces descubriendo, como si se corriera un telón, resonancias, texturas.

La composición está dedicada a mis padres. En una composición anterior (Ayayayayay) se escucha en un lugar expuesto las palabras «…y ahora vamos por aquí…», pronunciadas por mi padre. Durante el trabajo composicional perdieron su valor semántico y se convirtieron en un símbolo acústico de mi padre.

Durante el trabajo de composición de la obra murió mi madre como consecuencia de una larga enfermedad. La composiición fue permeada por la presencia de la muerte. Más aún, la lectura del libro «Leben nach dem Tod», que relata experiencias de individuos clinicamente muertos pero que pudieron «regresar» a la vida, dinamizó más aún la idea del morir.